Durante el período que comprende el año 586 hasta 537 antes de Cristo, etapa denominada “el cautiverio de Babilonia” y exactamente luego de la destrucción del templo y el exilio, los Sabios Hebreos separaron los cinco libros (Pentateuco) en 54 porciones, en hebreo PARASHOT. Cada uno de estos fragmentos, junto con algunos agregados de profetas (Neviim en hebreo) eran y son hoy en día leídos y explicados al pueblo judío y a todo aquel que desee albergar la luz de la Torá y su sabiduría eterna.